Trabajar la expresión oral conlleva beneficios muy significativos para el desarrollo lingüístico. Permite potenciar la estructuración correcta de las oraciones, fomentando un lenguaje expresivo más claro y coherente, además de contribuir a ampliar el repertorio de estructuras sintácticas, dotando así de una mayor complejidad y diversidad lingüística.

Ayuda a consolidar el uso adecuado de tiempos verbales, preposiciones y conectores, que son elementos cruciales para dotar al relato de una coherencia y cochesión adecuada. Este trabajo no solo beneficia a la expresión oral, sino que también influye positivamente en la comprensión de las reglas gramaticales, fortaleciendo las bases del lenguaje.

Trabajar la expresión oral con nuestras peques y nuestros peques contribuye a fomentar, potenciar y desarrollar herramientas lingüísticas sólidas que les serán útiles en diversos contextos comunicativos, y no hay mejor formar para hacerlo que jugando

Cecilia Sojo Pizarro
Logopeda